Un paseo por el parque nacional Torres del Paine

Este debe ser uno de los lugares más fascinantes que he visitado. Me declaro un adicto a la naturaleza. La van me recogió el domingo a las 8:15 am para llevarnos a un “full day” al Parque Nacional Torres del Paine. Al comienzo tenia expectativas bastante moderadas. Un amigo tuvo la oportunidad de venir a este lugar y para su “mala suerte” estaba nublado no pudiendo apreciar la increíble vista del macizo. Aun así no pasaron muchos minutos antes de que comenzara a deslumbrarme con lo que mis ojos estaban viendo. Una alegría profunda me comenzó a embargar a medida que nos acercábamos a la vista de las torres. En un momento del viaje, tenía ganas de saltar de felicidad por lo que mis ojos tenían el privilegio de ver. Pero me contuve para no hacer un escándalo en la van que estaba llena de turistas. Aunque me contuve de saltar, por dentro estaba gritando, mientras observaba la vegetación, los lagos congelados y la fauna (entre ellos Ñandús, Cóndores, Llamas y hasta una liebre que nos siguió al borde del camino por algunos segundos). En medio del disfrute, no podía dejar de dar gracias a Dios por el momento que estaba experimentando. Y al mismo tiempo agradecerle por lo perfecto e inteligente de su diseño. Claro que si!!. Estoy convencido de que todo lo que vi no fue producto un accidente cósmico, sino es el resultado de un diseñador inteligente. Y como me iba a quedar callado. No me pude contener. Creo que las imágenes hablan más que mil palabras así compartiré algunas de las fotos que tome en este loco día por la Patagonia.










Las otras fotos las subiré a Facebook...